La actriz porno, Stormy Daniels se acerca a Trump con una nueva propuesta

La actriz porno Stormy Daniels ofreció el lunes otorgar al presidente Trump $ 130,000 si es liberada de su acuerdo para guardar silencio sobre la relación sexual que dice haber tenido con él en 2006.

Daniels, quien recibió $ 130,000 de una compañía establecida por el abogado de Trump como parte del pacto de confidencialidad, demandó a Trump en un esfuerzo por anular el trato.

El abogado de Trump, Michael Cohen, dice que el dinero del silencio proviene de su propia línea de crédito con garantía hipotecaria, pero no ha quedado claro si el presidente le reembolsó. La propuesta de Daniels de devolverle sus $ 130,000 a Trump, independientemente de dónde se originó el dinero, fue parte de una oferta para resolver una demanda que presentó la semana pasada contra Trump.

El acuerdo, esbozado en una carta del abogado de Daniels, Michael Avenatti de Newport Beach, le permitiría a Daniels hablar libremente sobre su relación con Trump y los intentos de silenciarla.

Ademas, permitiría a Daniels hacer público cualquiera de sus mensajes de texto, fotos o videos que involucran al presidente. Bajo el acuerdo de confidencialidad, alcanzado días antes de las elecciones presidenciales de 2016, se le exigió entregar todo ese material a Trump.

El acuerdo prohibiría que Trump y sus representantes buscaran una orden judicial para impedir que CBS News emitiera una entrevista de “60 minutos” que Daniels hizo la semana pasada con el colaborador Anderson Cooper.

La oferta, dada a conocer por primera vez por el New York Times, vence el martes a las 9 a.m. hora del Pacífico.

La propuesta fue enviada a Cohen y a otro abogado de Trump, Lawrence Rosen. Ninguno respondió a un correo electrónico en busca de comentarios.

La demanda de Daniels, presentada el 6 de marzo en Los Ángeles, acusa a Cohen de utilizar “intimidación y tácticas coercitivas” para evitar que Daniels hiciera pública su historia. Daniels dice que Cohen inició subrepticiamente un falso procedimiento de arbitraje que dio como resultado una orden de restricción temporal que la obligaba a cumplir el acuerdo de confidencialidad. La demanda argumenta que el trato no es válido porque Trump no lo firmó.

La supuesta búsqueda de sexo extramatrimonial de Trump le está causando problemas legales crecientes, comenzando con las tácticas que Daniels ha usado para eludir las restricciones de su trato para guardar silencio. Al mismo tiempo que evita los comentarios públicos directos sobre el presunto romance, Daniels capitaliza toda la publicidad con una gira “Make America Horny Again” de los clubes de striptease de costa a costa.

Avenatti ha sido menos tímido, afirmando sin rodeos en la televisión nacional que su cliente tuvo sexo con Trump.

Common Cause, un grupo de ética no partidista, ha presentado quejas ante el Departamento de Justicia y la Comisión Federal Electoral alegando que se pagó el dinero del silencio para influir en las elecciones presidenciales. Acusa a la campaña de Trump de violar la ley federal al no revelar el pago como un gasto de campaña.

El lunes, Common Cause enmendó sus quejas para acusar personalmente a Trump y Cohen de violar la ley electoral federal.

“Si las acusaciones resultan ser ciertas, es difícil argumentar de manera creíble que los pagos del dinero para encubrir una aventura entre un candidato presidencial y una estrella de cine adulto, no tenían la intención de influir en esa elección”, dijo Paul S. Ryan, el vicepresidente de políticas y litigios del grupo.

“El dinero para comprar el silencio puede ser un lugar común en algunas empresas, pero cuando se gasta para influir en una elección federal, debe divulgarse, sin excepción”.

Cohen, quien utilizó su correo electrónico Trump Organization para hacer arreglos bancarios para el pago de $ 130,000 en octubre de 2016, niega que se hayan violado las leyes de campaña.

Al igual que Common Cause, Daniels alega en su demanda que el intento de Trump de silenciarla tenía la intención de influir en las elecciones.

Daniels, de 38 años, cuyo verdadero nombre es Stephanie Clifford, dice que conoció a Trump en 2006 en un torneo de golf en Lake Tahoe. En 2011, contó a la revista In Touch que tuvo relaciones sexuales con Trump ese fin de semana, que fue meses después de que su esposa, Melania, diera a luz a su hijo, Barron. Daniels dice que siguió viéndolo durante gran parte de 2007, incluido un encuentro en un bungalow en el Beverly Hills Hotel.

Otra mujer, Summer Zervos, ha presentado una demanda por difamación contra Trump en Nueva York. Unas semanas antes de las elecciones de 2016, Zervos, una ex concursante de “The Apprentice”, acusó a Trump de intentar forzarla a tener sexo con él en 2006 en un bungalow en el Beverly Hills Hotel. Después de que Trump la llamó mentirosa, ella lo demandó, exigiendo una retractación o una disculpa.

Trump ha negado las acusaciones de Zervos.

En otro caso, Karen McDougal, una ‘conejita’ de Play Boy en 1998, dice que ella también tuvo relaciones sexuales con Trump durante el evento en Lake Tahoe en 2006. En un acuerdo de confidencialidad de 2016 que le impide hablar de su relación con Trump, McDougal recibió $ 150,000 de American Media Inc., editor del National Enquirer, que nunca publicó su historia sobre la supuesta cita.

David Pecker, presidente y director ejecutivo de American Media, es un amigo cercano del presidente. La compañía ha negado que suprimio la historia de McDougal como un favor para Trump.

McDougal había mantenido una cuenta detallada del presunto romance en ocho páginas de notas escritas a mano que la revista New Yorker reveló el mes pasado.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí