Trump amenazó a Guatemala después de que la corte de ese país bloqueó un acuerdo de asilo
WASHINGTON — El martes, el presidente Trump amenazó con tomar represalias contra Guatemala por la inmigración, después de que el tribunal superior de ese país le impidiera a su gobierno firmar un acuerdo de asilo con Estados Unidos.
Trump tuiteó que Guatemala decidió no firmar un “Acuerdo de tercer país seguro”, que obliga a los migrantes centroamericanos que quieren asilarse en Estados Unidos a solicitar dicho beneficio en Guatemala, a pesar de que el gobierno de esa nación nunca afirmó estar de acuerdo con tal pacto.
Parece que todo el mundo tiene un pariente cercano en Estados Unidos. El éxodo está impulsado por la economía.
“Guatemala, que ha estado formando caravanas y enviando a Estados Unidos un gran número de personas, algunas con antecedentes penales, decidió romper el trato que tenía con nosotros para firmar un acuerdo de tercer país seguro. Estábamos listos para hacerlo”, se quejó Trump en su tuit. “Ahora estamos viendo el ‘VETO’”, escribió, junto con los cánones, las tarifas del dinero de remesas que los guatemaltecos que trabajan en EE.UU envían de regreso a su país, “o todo lo anterior”.
“Guatemala no ha sido buena”, escribió, aunque no hay evidencia de que el gobierno guatemalteco haya tenido algo que ver con organizar las caravanas de migrantes o “enviar” personas a Estados Unidos.
El lunes había confusión entre los migrantes que se dirigían al norte en Tijuana, luego del último intento de la administración Trump de prohibir que prácticamente todos los extranjeros soliciten asilo en Estados Unidos.
El máximo tribunal constitucional de Guatemala recientemente otorgó tres medidas cautelares que impiden que el presidente, Jimmy Morales, firme un acuerdo. Los mandatos habían sido solicitados por un grupo que incluyó a tres ex ministros de Relaciones Exteriores de ese país.
Una reunión programada para el 15 de julio entre Trump y el presidente de Guatemala también fue suspendida, porque el alto tribunal aún tenía que emitir su fallo.
Un juez federal dice que la administración Trump puede hacer cumplir sus nuevas restricciones sobre el asilo con las personas que cruzan la frontera México-Estados Unidos.
El portavoz de Morales, Alfredo Brito, afirmó que el gobierno no había tenido una reacción inmediata, pero que emitiría una declaración más tarde ese día. “Guatemala nunca habló de firmar un acuerdo de tercer país seguro”, con Washington, aseveró Brito.
Una declaración conjunta entre las naciones, emitida el lunes, tampoco mencionó al “tercer país seguro”, incluso cuando destacó que los dos gobiernos “continúan logrando avances importantes en un enfoque regional integral para abordar los patrones de migración irregular”, y citaron esfuerzos mancomunados “para reducir el flujo de los mismos y garantizar la seguridad y protección de las poblaciones vulnerables, especialmente los niños”.
Un ‘acuerdo de tercer país seguro’ significaría que los salvadoreños, hondureños y personas de otros lugares que cruzan a Guatemala tendrían que solicitar asilo allí en lugar de hacerlo en la frontera de Estados Unidos, lo cual podría aliviar la aglomeración de migrantes que abruman el sistema inmigratorio estadounidense, y permitirle a Trump anunciar eso como una victoria.
Los críticos han señalado que el gobierno guatemalteco no tiene los recursos para ayudar a los migrantes y solicitantes de asilo que intentan llegar a Estados Unidos, cuando decenas de miles de sus propios ciudadanos han huido este año.
Los funcionarios estadounidenses remarcaron que el tema de un “tercer país seguro” estaba sobre la mesa de discusión, aunque la cuestión no estaba finalizada, incluso cuando el gobierno guatemalteco dijo que no tenía la intención de pactar. El mismo patrón se generó con México; mientras Trump insiste en que habían aceptado un acuerdo secreto de “tercer seguro”, dicho país lo ha negado.
Trump y su administración han hecho numerosos intentos para tratar de evitar que los migrantes soliciten asilo legalmente en EE.UU, incluida la emisión de una nueva norma, la semana pasada, que negaría ese beneficio a cualquier persona que pase por otros países en ruta a EE.UU sin pedir refugio en al menos uno de ellos.
Dos demandas fueron presentadas para impugnar la medida, y un juez en Washington, D.C., escuchó los argumentos el lunes. Un magistrado en San Francisco fijó una audiencia para el miércoles, por una querella similar.
Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí
Suscríbase al Kiosco Digital
Encuentre noticias sobre su comunidad, entretenimiento, eventos locales y todo lo que desea saber del mundo del deporte y de sus equipos preferidos.
Ocasionalmente, puede recibir contenido promocional del Los Angeles Times en Español.