Fuerte incremento de casos de coronavirus en California durante el fin de semana feriado
El panorama del coronavirus en California empeoró durante el fin de semana festivo, luego de que las hospitalizaciones siguieron aumentando y el domingo se añadieron más condados a la lista de vigilancia COVID-19 del gobernador Gavin Newsom, que ahora está en su nivel más alto desde que comenzó la pandemia.
La tasa de resultados positivos de las pruebas de coronavirus en California ha subido un 42% en las últimas dos semanas, según los datos publicados por Los Angeles Times. El aumento de los resultados positivos de las pruebas indica que la transmisión de la enfermedad está acelerándose.
El 4 de julio marcó el 15º día consecutivo en que California registró cifras récord de hospitalización de pacientes con coronavirus. El sábado, el estado anunció 5.669 pacientes con infecciones confirmadas en los hospitales de California, un aumento del 62% con relación a las dos semanas anteriores.
El 27 de junio, sólo una semana antes, el estado había reportado 4.498 pacientes hospitalizados con casos confirmados de COVID-19. El 20 de junio, la cifra era de 3.494.
El número de pacientes de la unidad de cuidados intensivos en todo el estado ha aumentado un 63% en las últimas tres semanas. El sábado, hubo 1.711 personas con infecciones confirmadas de coronavirus en las UCI; el sábado anterior, fueron 1.376; la semana anterior, 1.149; y el 13 de junio, 1.049.
Las autoridades de salud del condado de Los Ángeles dijeron el domingo que el fin de semana festivo fue el de mayor recuento de nuevos casos en un solo día desde que comenzó la pandemia. El viernes se reportaron más de 3.200 nuevos casos en el condado.
El condado de Contra Costa, en el Área de la Bahía de San Francisco, y el condado rural de Colusa, al noroeste de Sacramento, se agregaron el domingo a la lista de regiones que están siendo monitoreadas por sus crecientes conteos de casos y el aumento de hospitalizaciones, lo que eleva el número a 24. Los condados de Marín, Monterey y San Diego se unieron a la lista el jueves.
En muchas zonas, el incremento de los casos se atribuye a que cada vez más personas salen de sus casas para ir a trabajar o buscar servicios y a un aumento de las reuniones familiares y comunitarias, que son características del verano y una creciente inquietud a medida que la pandemia se prolonga. El condado de Marín, de acuerdo al gobierno del estado, tiene un problema adicional; un brote que se ha producido en la prisión estatal de San Quintín ha infectado a casi un tercio de los reclusos.
El domingo, las autoridades del condado de Marín anunciaron que los restaurantes tendrían que cerrar sus puertas de nuevo, poniendo fin a un corto lapso de servicio en las mesas y menús a mano. El área de mesas de los restaurantes de la zona sólo llevaba abierta una semana desde que se estableció la orden de mantenerse en casa a mediados de marzo. La prohibición actual durará al menos 21 días más.
A nivel nacional, el panorama es también sombrío. El ex comisionado de la Administración de Alimentos y Drogas de EE.UU dijo el domingo en “Face the Nation” de la CBS que “estamos donde nos encontrábamos en el pico de la epidemia durante el brote de Nueva York”.
Pero el Dr. Scott Gottlieb, que sirvió durante dos años durante la administración de Trump, dijo que hay una gran diferencia ahora: “Tuvimos un gran epicentro de propagación en Nueva York hace unos meses. Ahora tenemos cuatro epicentros principales de propagación: Los Ángeles, varias ciudades de Texas y de Florida y el estado de Arizona”.
Gottlieb también añadió que es posible que la nación se quede sin suministros de Remdesivir, un medicamento clave usado para los pacientes más enfermos de COVID-19.
“Ese medicamento tiene un largo ciclo de fabricación”, expuso. “Es poco probable que podamos aumentar el suministro de aquí a fin de año”.
Y advirtió que no hay alivio a la vista, que el otoño será “duro”, que “no parece que vaya a mejorar”.
“Vamos a tener epidemias que van y vienen a través de la nación en diferentes ciudades”, manifestó Gottlieb. “Se encenderán en diferentes momentos. Pero no vamos a ser capaces de aplastar este virus en este momento porque hay muchas personas infectadas a nuestro alrededor”.
El sur de California es un ejemplo de ello.
Las hospitalizaciones de pacientes con infecciones confirmadas de coronavirus en el condado de Los Ángeles han aumentado casi un 50% en las últimas tres semanas. El sábado, hubo 1.921 pacientes en los hospitales del condado de Los Ángeles con infecciones confirmadas; siete días antes, hubo 1.710; la semana anterior, 1.453; y la semana anterior, 1.285.
Apenas unos días antes de que comenzara el fin de semana festivo, las autoridades del condado de Los Ángeles advirtieron sobre “alarmantes aumentos en los casos, las tasas de positividad y hospitalizaciones” y proyectaron la posibilidad de que se agoten las camas de hospital en dos o tres semanas; el número de camas en las unidades de cuidado intensivo (UCI) podría agotarse en algún momento de julio.
En un memorándum emitido el sábado a los proveedores de salud locales, el Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles advirtió que, “si la trayectoria continúa, el número de camas de las UCI - nuestro recurso más limitado - es probable que se sature en un futuro próximo”.
En una actualización del 1 de julio en el sitio web del condado de San Bernardino, las autoridades dijeron que el condado reportó 753 nuevos casos el 30 de junio, “el mayor número de casos registrados en un solo día”. El 4 de julio, el condado informó 1.024 nuevos casos. Las hospitalizaciones relacionadas con COVID-19 y el uso de camas en las UCI, señaló el condado, han “visto un aumento constante desde el 17 de junio”.
En el condado de Orange, las hospitalizaciones de COVID-19 han aumentado un 72% en las últimas dos semanas. El sábado, hubo 624 personas hospitalizadas con infecciones confirmadas de coronavirus; el sábado anterior, 492 fueron hospitalizadas; y el sábado anterior 363.
Las hospitalizaciones por coronavirus en el condado de Ventura aumentaron un 74% en las últimas dos semanas. El sábado, 82 personas estuvieron hospitalizadas; el sábado anterior, 65, y el sábado anterior, 47.
El condado de Riverside ha reportado un aumento del 63% en los casos confirmados de COVID-19 en las últimas tres semanas, según el rastreador de coronavirus de Los Angeles Times: 485 nuevos casos el 4 de julio; 340 el 27 de junio; 297 el 20 de junio.
Brooke Federico, oficial de información pública del condado de Riverside, dijo el domingo que las unidades de cuidados intensivos de la región están llenas en un 97.4%.
“Nuestros hospitales tienen capacidad para tratar a las personas en las instalaciones más allá de la autorizada”, manifestó. “Para eso nos hemos estado preparando”.
El condado de Imperial, donde hay una seria escasez de médicos y un cuarto de la población vive en la pobreza, es una historia diferente.
Durante una sesión informativa del 26 de junio, Newsom señaló al condado de Imperial como la zona del estado más afectada por el coronavirus. Por cada 100.000 personas en el condado, que limita con Arizona y México, más de 3.800 han sido infectadas por el virus. A nivel estatal alrededor de 650 de cada 100.000 individuos han sido infectados.
Los dos únicos hospitales del condado de Imperial, el Centro Médico Regional El Centro y el Centro de Salud Pioneers en Brawley, se saturaron. Sólo en las últimas cinco semanas, el condado de Imperial ha transferido más de 500 pacientes con coronavirus a otros condados para recibir tratamiento, un promedio de 15 a 17 personas por día, expuso Newsom.
Parte del desbordamiento se ha atribuido a un número inusualmente alto de admisiones hospitalarias relacionadas con el tráfico transfronterizo de Mexicali. Newsom dijo que el estado está “trabajando con Aduanas y Protección de la Frontera debido a problemas” relacionados con la frontera en Mexicali y Calexico.
Los hospitales no revelan de dónde vienen sus pacientes, pero sí tratan rutinariamente a los viajeros transfronterizos, dijo Karina López, enlace de asuntos públicos del Centro de Salud Pioneers. La población del condado de Imperial es 85% latina, y muchos residentes son agricultores migrantes o inmigrantes recientes.
Al determinar qué pacientes atender, señaló López, el Pioneers Health Center no considera la residencia del paciente. Pero aunque el hospital sólo ha ocupado 68 de sus 107 camas de cuidados intensivos, ha rechazado a algunos pacientes.
“La principal preocupación para nosotros es que no tenemos suficientes enfermeras de cuidados intensivos para atender a los pacientes que llegan”, expuso López. “Aunque tenemos camas para ellos, no contamos con suficiente personal”.
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