Los votantes de California eligen a Bernie Sanders

California, el premio mayor de la fiesta electoral de 14 estados del Súper Martes, se ha puesto del lado del senador Bernie Sanders, según las proyecciones de Associated Press.

Sanders lideraba los encuestas de salida el martes por la noche, pero la pregunta sigue siendo si sus competidores también reclamarán alguna porción del trofeo estatal de 415 delegados.

La proyección llegó inmediatamente despues de que las urnas cerraron a las 8 p.m., aún cuando muchos votantes se encontraban todavía haciendo línea, con quejas generalizadas de largos retrasos en los lugares de votación.

La campaña de Sanders había presentado una queja pidiendo que los centros permanecieran abiertos durante horas adicionales para que todos pudieran votar.

El cuadro completo de la elección de California no se verá hasta dentro de varios días, si no semanas, ya que las complejas matemáticas de los delegados del estado y los expansivos procedimientos de votación hacen que el proceso de conteo sea muy lento.

El senador de Vermont, dirigiéndose a una multitud de su estado natal una hora antes de que se cerraran las urnas de California, cifró sus esperanzas para la noche en parte por una fuerte actuación en el Estado Dorado.

“Soy cautelosamente optimista en que más tarde en la noche, podremos ganar el estado más grande de este país, el estado de California”, dijo Sanders.

Como en otras partes del país, la carrera presidencial en California ha sido volátil, con al menos cuatro contendientes liderando las encuestas en el estado en diferentes puntos durante los últimos siete meses. Las actuales encuestas muestran que Sanders se está alejando de sus competidores, apuntando a un triunfo de tal magnitud que tiene el potencial de impedir que sus competidores consigan delegados significativos en el estado.

Para Sanders, ganar en California tiene un peso simbólico extra. Perdió las primarias del estado en 2016 contra Hillary Clinton por siete puntos, un día después de que la Associated Press informara que Clinton había logrado el apoyo de suficientes delegados para conseguir la nominación.

Esta vez, con las primarias de California trasladadas de junio a marzo y con un bastión comprometido de partidarios que le prestaron a Sanders una ventaja organizativa, el Estado Dorado fue un factor importante en su proyecto de campaña.

Sus estrategas colocaron a California entre los “cinco primeros” estados cruciales, junto con los tradicionales estados de Iowa, New Hampshire, Nevada y Carolina del Sur, que fueron los primeros en nominar, y construyeron una extensa operación de campo con 105 empleados remunerados.

El propio Sanders visitó con frecuencia el estado y organizó concentraciones no sólo en los centros de población de Los Ángeles y la zona de la bahía, sino también en ciudades a menudo olvidadas del Valle Central.

Su éxito se basó en el apoyo básico que prestó a los votantes jóvenes y muy liberales con un alcance importante de la gran población latina del estado. Sanders ganó el 55% de ese bloque, según las encuestas de salida de CNN.

“Nos ve como seres humanos”, dijo Mildred Dimas, una residente de 30 años de Boyle Heights e hija de inmigrantes mexicanos. “Empatiza con nuestra historia de inmigrantes”.

Pero Joe Biden fue impulsado por un gran desempeño con los votantes mayores, los moderados y los afroamericanos, según las encuestas a boca de urna.

“El impulso ha cambiado a su favor”, señaló José Marroquín, un jubilado de 67 años de Los Ángeles que había decidido apoyar a Biden tan pronto como entró en la carrera. “En realidad estoy pensando que la marea ha cambiado”.

Impulsados por el anhelo del estado por la relevancia política, los funcionarios de California trasladaron las elecciones primarias del estado a principios de marzo, en lugar de junio de las dos elecciones anteriores, con la esperanza de que los resultados dieran forma a la carrera presidencial.

Aunque el estado todavía recibió mucha menos atención de la que los candidatos prodigaron a Iowa y New Hampshire, los californianos tuvieron más oportunidades de ver a los contendientes en mítines y otros eventos en persona. La carrera fue aún más acalorada en las vías electrónicas, con más de 120 millones de dólares en publicidad televisiva que cubrió el estado desde principios de 2019. Más de la mitad de eso provino de un candidato, Michael R. Bloomberg, que bombardeó el estado con publicidad inmediatamente después de entrar en la carrera en noviembre pasado.

Las figuras políticas demócratas se apresuraron a declarar las primarias como un éxito.

“Tuvo absolutamente el impacto deseado. ...Los candidatos establecieron operaciones significativas en todo el estado durante las primarias, vertieron recursos para comunicarse con los votantes demócratas y cortejaron a los demócratas al enfocarse en temas importantes de California”, expuso Rusty Hicks, presidente del Partido Demócrata de California.

Paul Mitchell, especialista en datos políticos, dijo que el reciente aumento del apoyo a Biden entre las figuras moderadas del partido, incluyendo a sus antiguos rivales - el ex alcalde Pete Buttigieg, la senadora Amy Klobuchar de Minnesota y el ex diputado Beto O’Rourke de Texas - fue impulsado por el deseo de negarle a Sanders un camino hacia la nominación.

“Los increíbles acontecimientos de las últimas 24 horas no habrían ocurrido si no tuvieras una quinta parte de todos los delegados que necesitas para ganar la nominación que te otorga el Súper Martes”, apuntó Mitchell. “Estos eventos están ocurriendo porque California adelantó sus primarias”.

Con el juego político llegando a su fin, la atención se centra ahora en el recuento, un proceso notoriamente prolongado en California, gracias a la popularidad de las papeletas de voto por correo, que cuentan siempre y cuando estén selladas por el correo el día de las elecciones, y la disponibilidad de registro el mismo día, lo que da lugar a un gran número de papeletas provisionales.

Hay efectivamente 54 primarias en curso en California; una basada en el total de votos en todo el estado, que se repartirán entre 144 delegados, y 53 carreras en distritos congresionales individuales, que en conjunto suman 271. En cada contienda, un candidato debe obtener al menos el 15% de los votos para obtener delegados.

“Verán mucho movimiento en esos números de delegados en el curso de las próximas semanas una vez que lleguen todos los votos”, indicó Roger Salazar, portavoz del Partido Demócrata de California. “Nuestra perspectiva es que preferimos un recuento exacto que un recuento rápido”.

Algunos votantes tuvieron en cuenta los prolongados procedimientos de conteo del estado al elegir cómo votar. Lisa Marie Desai, una taquígrafa de 37 años de Culver City, optó por dejar su boleta de voto por correo en su centro de votación local para asegurarse de que su voto por Warren sea contado rápidamente.

“Podría haber puesto mi boleta en el correo hoy mismo y tendría el sello postal”, dijo Desai. “Pero quería ser parte de las cifras de hoy. Deseaba ser parte de los resultados del día de las elecciones”.

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